SHAKTI – El principio femenino del Tantra
El tantra nos muestra una visión muy diferente respecto lo masculino
y lo femenino, mientras lo masculino es pasivo y receptivo, lo
femenino es acción y poder.
Si Shiva es el espectador, Shakti es la actriz.
Shakti aparece cuando el Dios Shiva se retiró del mundo para vivir
solo en las montañas del Himalaya, completamente inmerso en
meditación, poniendo en peligro el equilibrio del mundo.
Shiva no hacía nada y los otros Dioses empezaron a preocuparse, pues
peligraba la existencia de todas las cosas y seres.
Fue entonces cuando imploraron a la gran Diosa para que adoptara forma de
mujer (Shakti) y se casara con Shiva, para proporcionarle energía
vital, trayéndole de vuelta al mundo y sacándolo de su estado
meditativo.
Shakti aceptó con una condición: Los dioses y los hombres debían dejar de
menospreciar a las mujeres y al poder femenino, puesto que no
ocupaban un lugar inferior en la jerarquía cósmica.
“Tenéis que venerarme como a la Gran Diosa, si no lo hacéis, desapareceré
concluyendo que el mundo no está preparado.”
Shakti es denominada y venerada como la Gran Diosa, una suma de todas las
demás Diosas.
